martes, enero 01, 2008

Terapias alternativas: Enfermedades renales (Dra. Margarita Madrid Guillen)

El cuerpo humano posee dos riñones que son de vital importancia. La falta de uno de ellos no impide llevar una vida normal. Su función es filtrar la sangre y purificarla de los desechos; el agua excedente extraída forma la orina que pasa a través de los ureteros a la vejiga y sale por la uretra. Además, regulan la presión arterial y el equilibrio del cuerpo.

Las principales enfermedades son los cálculos o piedras, de tamaño variable, que pueden descender por las vías urinarias. Las causas más frecuentes para su formación son orina muy concentrada o infecciones renales. Generalmente, los cálculos no producen dolor al localizarse en riñón, pero si buscan salir, al atorarse, aparece el cólico renal, un ataque intermitente de dolor intenso y ardoroso en la espalda que baja y se refleja en el abdomen y órganos genitales, y sangre al orinar.

La pielonefritis, padecimiento que puede ser consecuencia de infecciones en las vías urinarias bajas (vejiga y uretra), la próstata o transmitidas por vía sanguínea. Presenta dolor en la zona renal irradiando a los costados, abdomen y bajo vientre, fiebre, cambios en el olor y color de la orina y deseos constante de hacerlo. Es poco común, pero grave por comprometer al sistema inmunológico produciendo anticuerpos que atacan al propio tejido renal. En esta enfermedad la orina es escasa, roja con retención de líquidos, dolor de cabeza, espalda e hipertensión arterial. Algunos pacientes llegan a sufrir insuficiencia renal requiriendo trasplante o uso de hemodiálisis o diálisis peritoneal.

El cáncer puede afectar a los riñones manifestándose por sangre en la orina y ausencia e insuficiencia renal. Esta última es una complicación muy común de diabetes.
En caso de infección, se recomienda tratamiento médico alópata pues si no se trata, produce daños irreversibles en ambos riñones.

Las terapias alternativas son sólo un recurso para mitigar los síntomas. La acupuntura que puede agregar moxibustión, se aplica en puntos específicos de los meridianos afectados para fortalecer los riñones. En herbolaria, se recomiendan hojas de gobernadora, cola de caballo, doradilla, uva ursi, etc. para reducir la inflamación y disolver cálculos pequeños. Sus efectos diurético depuran al sistema urinario. Debe reducirse el consumo de alimentos con calcio pues producen ácido úrico, como carnes, lácteos, espinacas, ruibarbo y chocolate; tomar pequeñas cantidades de vinagre de manzana o complementos de magnesio, beber abundante agua, jugos de piña, apio, perejil y chayote, y estimular zonas reflejas correspondientes a riñones, vejiga, sistema linfático, glándulas hipófisis y suprarrenales.

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