lunes, octubre 03, 2011

Salud y bienestar


Pirosis

La pirosis es un desorden digestivo caracterizado por la sensación de ardor o quemazón en la zona alta del abdomen o tórax que suele aparecer después de comer alimentos condimentados o muy grasosos.

Su origen es consecuencia del contacto del ácido estomacal con la pared del esófago, denominado reflujo gastroesofágico, consistente en el desplazamiento del ácido estomacal al esófago donde irrita la pared y provoca la estimulación de las terminaciones nerviosas que trasmiten la sensación de dolor en forma de ardor.

Sus causas son alteraciones de neurotransmisores implicados en el estrés y ansiedad, como la acetilcodina o la histamina, que modifican diferentes funciones orgánicas por sus efectos sobre los sistemas nervioso central y periférico y aumentan la secreción de ácido gástrico y reducción de la barrera moco defensiva de la mucosa gástrica; pepsina y sustancias de la bilis que irritan el esófago.

La pirosis se trata, principalmente, con antiácidos por su función neutralizante de la secreción ácida producida por el estómago. Un antiácido estomacal contiene un elemento que, al contacto con el ácido clorhídrico, genera una reacción química que disminuye la concentración del ácido en el estómago.

Algunos de esos antiácidos contienen derivados del aluminio, sustancias que, al contacto con la mucosa estomacal, evitan que se produzcan movimientos en el esófago y estómago que impulsen el ácido estomacal hacia las vías superiores e impiden la sensación proveniente del reflujo ácido.

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