Terapias alternativas: ¿Qué es el bruxismo? (Dra. Margarita Madrid Guillen)

Es el hábito de apretar y rechinar los dientes. Suele ser más frecuente por la noche, al dormir, aunque también se presenta durante el día. Es inconsciente, quizá para contrarrestar ansiedad, miedo o nerviosismo.

Trastorno muy antiguo que afecta a gran cantidad personas que, en la mayoría de los casos, no están conscientes del hábito hasta detectarles desgaste dental irremediable. Es más atribuible a estrés, pero puede deberse a oclusiones dentales anormales; a dientes torcidos o falta de algunos de ellos, pero no a parasitosis intestinal, pues no existe nada que lo evidencie.

Los síntomas más frecuentes incluyen dolor de cabeza, en frente y sienes; dolor y cansancio de músculos faciales, oídos, dientes sensibles y chasquido de mandíbula. Durante la exploración dental, se identifican lesiones como pérdida de esmalte en las superficies de masticación, y dentales, aplanamiento de su superficie y mordida de los carrillos.

Si no se trata en sus inicios da lugar a la pérdida definitiva de los dientes y a disfunción de la articulación temporomandibular. Es importante realizar una historia clínica completa, médica y dental, exploración física exhaustiva y radiografía para distinguirlo de otros trastornos que pueden tener síntomas similares.

El principal factor para corregirlo es tratar el estrés y producir relajación. Hay diferentes técnicas, como la hipnosis para eliminar el bruxismo; aplicar compresas calientes a ambos lados de la cara para relajar los músculos de la mandíbula, también se puede recurrir a la acupuntura. El masaje terapéutico y técnicas de relajación, como yoga, ayudan a corregir el hábito. Remedios herbolarios sedantes y antiespasmódicos, como valeriana, pasiflora, tila, toronjil, azahares, kava-kava y otros que producen sedación suave y relajación muscular son útiles. Todo lo que ayude a reducir la tensión nerviosa disminuirá el bruxismo y sus síntomas. El dentista, por lo general, sugiere colocar un protector dental que evita el contacto de los dientes superiores con los inferiores.