
Los filtros de carbón activado absorben contaminantes orgánicos del agua, eliminan químicos responsables del olor y sabor desagradables y remueven residuos de cloro, pesticidas y ácido sulfhídrico. Tomado el carbón vegetal después de una comida evita el meteorismo. Contrarresta diarrea, estreñimiento y espasmos abdominales al absorber materiales de desecho del tracto gastrointestinal. Algunos estudios aseguran que su uso frecuente puede disminuir la absorción de medicamentos, nutrientes esenciales, como vitaminas y minerales, principalmente en niños. Para uso externo se prepara una masa, elaborada con el carbón y agua para limpiar heridas y calmar el dolor por picaduras de insectos o mordeduras de serpiente. Combinado con áloe acidophilus y zaragatona controla la colitis ulcerosa.
Se adquiere en farmacias y tiendas naturistas, en comprimidos, cápsulas, en polvo o líquido. A veces, puede producir inflamación o dolor estomacal por lo que siempre es necesaria la intervención médica. Es menos eficaz en quienes tienen una digestión lenta. No debe tomarse por más de tres o cuatro días para tratar la diarrea, ni mezclarse con chocolate, helados o bebidas con gas, ya que impiden que actúe adecuadamente. Si su uso se prolonga por periodos largos puede interferir con la nutrición. No debe emplearse en menores de tres años y mantenerse fuera de su alcance. Si causa estreñimiento, puede tomarse algún laxante.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario