martes, enero 13, 2009

Terapias alternativas: Flores de Bach para la menopausia (Dra. Margarita Madrid Guillen)

La vida reproductiva inicia aproximadamente a los 12 años y termina alrededor de los 50 al llegar la menopausia, periodo que presenta cambios físicos y emocionales en el organismo, aunque muchas mujeres mayores de 45 años estén más sanas que algunas de 20 ó 30. La cascada de síntomas surge por la declinación hormonal, llamada climaterio, que abarca unos pocos años. Los ovarios dejan de responder a las hormonas de la glándula hipófisis y desparece la ovulación. Los bajos niveles de estrógenos son los responsables de esas manifestaciones.

La menopausia suele asociarse con el envejecimiento y fin de la vida útil. La mujer necesita tiempo para adaptarse a estos cambios, sobre todo, sicológicos, como llanto fácil, mal humor, depresión y ansiedad. Algunas, que eran pasivas, se vuelven intolerantes, insatisfechas y con falta de sentido en sus vidas; las muy activas y llenas de vida, se fatigan fácilmente, son muy sensibles y negativas por temor a envejecer. Muchas se sienten vacías, que ya no agradan a sus parejas, que están viejas y van a aparecer enfermedades propias de esta edad. No es así. Es sólo una etapa de transición, llamada segunda adolescencia. Aún les quedan muchos años de vida, pues aseguran que ésta empieza a los 40. Ahora ya están libres de menstruaciones y embarazos, sus hijos ya son mayores y en su vida empieza un periodo para disfrutar, sentirse libres y descansar.

Hay una Flor de Bach para cada una de esas manifestaciones que le ayudarán a superar los problemas

Mimulus reduce el nerviosismo, timidez y enrojecimiento facial. Impatiens trae calma y paz a mujeres irritables, inquietas y que se alteran con facilidad. Olive reduce la fatiga física y emocional. Sweet chesnut alienta a continuar a las que sufren depresión y a quienes no tienen pareja o no están casadas y se desesperan, se frustran, sienten nostalgia por haber dejado pasar el tiempo. Star of Belem reanima a quienes sienten mucho pesar y tienen ideas de pérdida. Gorse restaura la fe y confianza a las que sufren desesperanza y pesimismo. Scleranthus crea estabilidad en todas las emociones fluctuantes y ayuda a quienes no se sienten atractivas, son irritables y discuten de todo y con todos.

En fin, para todos los cambios, físicos o emocionales, que aquejan a la mujer en esta etapa de su vida estas flores podrán restaurar su equilibrio interior.

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