Una nueva enfermedad recorre el mundo. Se trata de una adicción: la WhatsAppitis, deseo convulsivo de estar mandando y recibiendo mensajes a través de WhatsApp.
Este problema de salud se da en casi todas las edades, pero está muy arraigado entre jóvenes, adolescentes y algunos niños, aunque también personas mayores participan de ella. El tratamiento no es sencillo, según especialistas, quienes creen que no se cura con antiinflamatorios, como se hace con la tendinitis, ni con férulas ortopédicas, sino con una deshabituación.
Aseguran que no se necesita buscar un remedio en la farmacia, sino hacerlo en el cine, un centro deportivo o cualquier otro lugar donde se pueda olvidar de esta práctica y desprenderse de la adicción.
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