El ejercicio físico ayuda a controlar el azúcar en la sangre. Es otra manera de prevenir complicaciones asociadas a esta patología, como males cardiovasculares, presión arterial alta, colesterol, triglicéridos elevados, estrés y depresión. Ayuda a quemar calorías, aumentar el metabolismo, benéfica e importante para adelgazar. Como es una herramienta poderosa para bajar los niveles de glucosa, se puede reducir la necesidad de insulina o medicamentos.
Debe practicarse de forma que sus beneficios aumenten para disminuir los riegos. Tiene que consultarse al médico antes de iniciar un programa de ejercicio físico y comprometerse a realizarlo constantemente y por periodos largos. Debe ser fácil y divertido para convertirse en un buen hábito por el resto de la vida.
Casi cualquier ejercicio que se disfruta sirve como actividad física. Deben elegirse los de bajo impacto para usar todos los músculos de forma rítmica, como natación, caminata, baile, bicicleta, pesas, etc. Además, fomentar la recreación, como salir de compras, jardinería y caminatas adicionales que aumenten el metabolismo para quemar grasa.
El tiempo más conveniente para realizarlos es después de los alimentos, las mañanas o al medio día, pero nunca por las noches, porque podrían ocasionarle hipoglucemia (bajos niveles de glucosa en la sangre) o insomnio. Recuerde que el ejercicio es como tomar medicamentos para controlar la diabetes, por lo que debe ser diario, mínimo 5 días a la semana. La rutina debe empezar y terminar con algunos minutos de actividad lenta y suave (calentamiento y enfriamiento) y la zona de ejercicio debe ser de intensidad moderada y relajante sin producir dolor y que permita hablar, aunque no cantar. La tensión mental puede aumentar, en forma brusca, la presión arterial o la concentración glucosa en la sangre.
Cada sesión iniciará con 5 a 10 minutos, aumentará, gradualmente, 5 minutos por semana hasta completar 20 ó 30 minutos continuos. Si se quiere adelgazar, el tiempo será de 45 a 60 minutos. Debido a que el ejercicio disminuye el azúcar en la sangre, puede ser necesario tomar un refrigerio o disminuir la dosis de insulina o del medicamento oral, antes de ejercitarse, cuyo ejercicio puede ser 99 por ciento de inspiración y 1 de transpiración. Realícelo acompañado. Déle variedad para evitar la monotonía. Sea constante para que los beneficios sean verdaderos y no sufrir complicaciones que agreguen otro problema.
Lleve una alimentación correcta con mayor cantidad de vegetales y frutas que le provean antioxidantes, dedicados a reparar tejidos dañados.
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