Formación de piedras
La formación de cálculos o piedras en el organismo humano se da siempre en un sitio inflamado donde se junta mayor cantidad de sangre y que, por lo mismo, genera más calor del acostumbrado.
Debido a esta acumulación de calor la sangre no puede circular y, por ende, pierde, en promedio, 79 por ciento del agua que contiene, mientras que el restante 21 por ciento se compone, básicamente, de materias sólidas como glóbulos, albúmina, azúcar, grasa, carbonatos y sales, depositadas en el fondo de ese sitio.
Al aglomerarse algunos de esos materiales conforman lo que se denomina en forma popular piedras, sumamente dolorosas, y cuyo diámetro es mayor al de la circunferencia del canal por donde deben circular.
Para disolverlas, la medicina popular aconseja utilizar plantas fundentes, como apio, belladona, espárrago, linaza o parietaria.
La administración de estas plantas puede ser, de preferencia, en forma de cataplasma, aunque también se aconseja tomarlas en cocción para limpiar la sangre de las impurezas que contiene.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario